hace solo unos minutos me acabo de dar cuenta (o talvez fue producto de algo que vi) que odio el hi5. en realidad lo que realmente odio, creo yo, es esta vida de sube y baja que estoy llevando estos días. se me hace más difícil cada día dar un paso y más difícil aún no sentirme invadido por la nostalgia. me doy asco, por así decirlo. quisiera mandar a la mierda todo y poder ser otra vez (aunque quizás nunca lo fui) alguien que le gustaba un poco más esta vida. quiero ir al cine, hace como dos meses que no voy, quiero ver walle y otras películas más, pero estos días no existe (o talvez yo no la veo) la persona adecuada para eso. siento que si me encontrara por ahí con alguien como yo, sentiría unas ganas incontrolables de putearlo infinitamente por, como se dice comúnmente por las calles, webón. solo me consuelan, no siempre, las caminatas que a veces hago por Miraflores (cerca del mar) mientras siento el frio aire golpearme las mejillas y jugar con mis cabellos. mucho tiempo creí que yo era realmente mejor que otras personas (especialmente de una), pero hoy me doy cuenta que no, que realmente solo me mentía a mí mismo y que aquella persona que tanto detesto es mejor, a pesar que suene doloroso admitirlo. "La historia de un sufrido hijo de puta" fue el poema de Bukowski que nos leyó Pierre la semana pasada en una reunión de Heridita. cuando terminó de leerlo no pude evitar sentirme conmovido e identificado con él y su gato. realmente parecía ,más que un poema, la descripción de mi vida. tan solo quisiera, literalmente, arrancarme el corazón y dejarlo en uno de estos tantos basureros que tiene la ciudad de Lima o sino regalárselo a alguien que desee uno maltratado, algo sucio y agujereado. quisiera que lloviera más en Lima, porque para mí es una forma de consuelo o de camuflarse entre la gente y el mundo. sé que tú, si lees esto, vas a estar molesta y probablemente te pondrás a renegar y me podrías decir miles de cosas a las que yo te respondería que simplemente no me importa y que todo este mundo, y tu también, pueden irse al carajo. es que realmente es imposible que tú, o personas normales, (aunque realmente solo tú me entendías) entiendan como es sentirse así. una vez me dijiste que yo era un muchacho de ojos tristes (o talvez lo soñé, quién sabe) y creo que es verdad porque cuando me miro al espejo puedo ver dentro de ellos un desierto enorme donde no se percibe vida alguna. son pocas las veces, y solo con cierta gente, en que me siento bien y me nace, sin forzar nada, las ganas de sonreír. quisiera tener un porro ahorita mismo, para fumármelo y mientras lo hago sentir que se va un poquito de esta vida miserable, y después agarrar un papel y lapicero y comenzar a escribir desesperadamente como tratando de buscar una salida, una solución, en medio de ese mar de letras y líneas que va dejando el lapicero sobre la blanca hoja. o tan solo quisiera cerrar los ojos y despertar juntito a ti… pero, lamentablemente, en navidad no llegan los milagros ni papanoel viene a dejarte regalos por haber sido un niño bueno. estamos atorados en este mundo absurdo y jodido, estamos obligados a seguir caminando por aquí porque si no seremos tomados como cobardes que escogen la salida fácil. en realidad si el camino es fácil o no, no me interesa. ¿por qué sigo andando aún? creo que es un enigma que ni Sherlock Homes podría resolverlo … o Freud, si es el caso.