para tí, para tí, para tí, ser extraño,
llena de silencios y enigmas,
que me vas cubriendo con el ritmo de tus caderas
y a pesar que no sepas nada,
sigues iluminandome,
poquito, bastante poquito,
pero suficiente




1.-

yo te quiero los viernes por la noche,
cuando todo se apaga y el cielo ya no es cielo sino tus ojos,
cerca de tu blusa negra, el tabaco y el licor entre tus labios,
cuando tu no puedes sentir el temblor que nace de mis manos
cuando tu pequeña sombra se acurruca junto a la mía

2.-

esta noche quiero escribir versos pequeños que me permitan reflejar mi corazón y sus latidos,
con esta pluma que en realidad no alcanza para dibujarte,
para dibujar sobre mi cuerpo ese universo extraño que es tu rostro,
esa amargura que es encontrarte en cada envoltura de caramelo,
en cada esquina que jamás hemos pisado,
porque tu no sabes,
y yo tampoco,
que cada noche pinto sobre tu almohada estas palabras que ahora lees,
y que son tuyas
solo tuyas
solo tuyas
y del silencio

3.-

te necesito unos minutos,
pequeña luciérnaga oscura,
necesito tu silencio majestuoso,
que con tus ojos infinitos me ayudes a decirte:
cúanto te adoro, cúanto te adoro, cúanto te adoro.