porque la muerte
es el testaferro más grande de la historia
El hombre se levantó aturdido y al verse comprendió que su cuerpo había sido mutilado por un sinfín de balas enemigas. Con desconfianza se tocó el pecho agujereado y comprobó que no estaba sangrando, el ruido que había alrededor comenzó a sonar en su cabeza como una licuadora despiadada mientras las imágenes que lo rodeaban se iban distorsionando hasta volverse nubes extrañas e inmóviles; estaba a punto de morir, por fin había llegado la hora de descansar, se dijo, y casi al final, cuando todo el lugar parecía apagarse, apareció frente a sus ojos, como un fósforo que de pronto se enciende, la verdad que se había estado ocultando desde que tenía memoria: los muertos no sangran.
Entonces, con resignación y congoja, volvió a levantar su fusil.
martes, febrero 03, 2009
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4 comentarios:
me alegro mucio ver tu comentario en mi blog... hace mucio que no se de ti mi niño nostalgico con algo de sarcasmo.
cada vez escribes mejor
"Los muertos en vida tampoco sangran..."
De acá podría salir un corto impresionante!
los muertos no sangrannnn nooooooooooooooooo
niñita malcriada
xD
o.O
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