viernes, octubre 09, 2009

digamos que pienso es de noche,
veo la luna y pienso,
una luz suave cae encima,
¿qué hacer con tanta noche,
kilómetros de ella,
y yo sin manos, solo con una ventana?
veo mis huesos: puro humo,
lo que hay debajo de la chaqueta,
mis ojos también,
mis piernas, mi grito,
tengo esa necesidad de volverme sólido,
que deje de verse a través,
tócame, tócame,
tira una moneda al aire,
si sale sello olvídalo,
alguna vez fui hombre que dejaba huellas,
ahora sin dedos, sin manos,
aunque sea inventarse algo,
sobre el papel decir: eh, podría serlo, quizás,
sin embargo no sucede, bah,
y mi ojo mira por la ventana,
mi ojo humo,
todo corre, se mueve,
lo veo pasar del otro lado,
hay alguien allí que me repite,
toca e inflige,
pone las manos contra su rostro y siente,
lleva nombre,
lleva sombra,
lleva vestido,
no se sabe observado,
duerme plácido el cretino,
abraza la carne ajena, se enrosca en ella,
entonces piensa: la carne arde con el fuego,
se vuelve ceniza, luego humo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

MARICAAAAAAA :E
te chupare el ojo por ignorarme y no comentarme en el facebook :D