lunes, setiembre 05, 2011

de pronto esperar
que la bestia del espejo
olvide cómo se escribía poesía
y cierta mañana despertar
y entender
que es imposible
que la única forma sería
que la poesía se olvide de la bestia
o que la bestia escriba:
"estos son los últimos versos,
la casa se incendia
y yo con ella;
Dios no existe aquí
y los inocentes
morimos sin consuelo alguno,
tristes,
desamparados"

1 comentario:

iii dijo...

genial saber q sigues vivo